El martirio de Fatima Zahra (P)

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Durante los últimos meses de la vida de Fatima Zahra, la hija del Profeta, ocurrieron algunos incidentes muy desagradables y dolorosos. Se ha mencionado que durante este período nadie vio a Fátima al-Zahra (P) sonriendo. La muerte de su padre, el evento de Saqifa, la usurpación del califato, la confiscación de Fadak por parte de Abu Bakr y la el sermón de Fadakiyyah en presencia de muchos compañeros importantes de su padre son algunos de los más importantes eventos que tuvieron lugar durante este período.

Permaneciendo al lado del Imam Ali (P), ella fue una de las principales opositoras del consejo de Saqifa y la elección de Abu Bakr como califa. Cuando el Imam Ali (P) y los otros opositores del califa se negaron a prestar juramento de lealtad (Bay’a), buscaron refugio en la casa de Fátima (P). Esto llevó a los partidarios del califa a atacar su casa y, como resultado de este ataque, Fátima (P) resultó gravemente herida cuando intentaba evitar que llevaran al Imam Ali (P) ante Abu Bakr para prestar juramento de lealtad. Esta fue también la causa de que sufriera un aborto. Después de este incidente, cayó muy enferma y poco después fue martirizada.

En P. 218, vol. 2, de Al Tarij de Al Tabari, se dice que en su lecho de muerte, Fátima (P) solicitó a su esposo que todos los que se oponían a ella y la habían oprimido no participaran en su oración fúnebre y entierro, que el propio Imam Ali realizara los ritos funerarios y que la enterraran por la noche. Según la opinión comúnmente aceptada, Fátima (P) falleció el 14 de Jumada II, 29 de agosto de 632, en Medina.

“Ali enterró a Fátima de noche y Abu Bakr no pidió que se pronunciara el adhan (para anunciar su muerte)”, señala Tabari. “Fátima no sobrevivió más de 75 días tras el fallecimiento de su padre. Ella emitió su último suspiro el 14 de Yumada II”.

Así, el Imam Ali (P), en cumplimiento de su voluntad, realizó todos los ritos funerarios y ella fue acompañada exclusivamente por sus familiares e hijos, que la llevaron por la noche al cementerio de Yannatu´l Baqi’, donde fue enterrada y sus deseos cumplidos. Habiéndola enterrado en la oscuridad de la noche, su esposo, el Emir de los Creyentes Ali (P) compuso estos versos de poesía:

¿Por qué me detuve ante las tumbas para saludar
la tumba de la amada, pero no respondió?
¡Oh amada mía! ¿Por qué no nos contestas?
¿Has olvidado la amistad de los seres queridos?
La amada dijo: ¿Cómo puedo responderte
mientras soy rehén de la tierra y las piedras?
La tierra se ha comido mis bellezas, así que me olvidé de ti,
y ahora estoy alejada de la familia y los compañeros
Entonces, saludos de mi parte para ti
Los lazos contigo están ahora cortados.
Y también los lazos con los seres queridos.

En la pg. 136 de Dalaa’il al Imama, se nos dice que quienes asistieron al entierro de Fátima en la oscuridad de la noche fueron, además de su esposo Ali (P), sus dos hijos Hasan y Husain (P), sus hijas Zainab y Umm Kulzum, su doncella Fidda y Asmaa, hija de Umays.