Jutba del id Fitr

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En el libro de «Bihar al Anuar» figura que el imam Rida (P) dijo:

El creyente no se considera como tal mientras no reúne tres cualidades.

1) El método de su Señor

2) El método de su profeta (P)

3) El método de su imam (P)

En cuanto al método de su Señor, consiste en guardar los secretos. Con respecto al método de su profeta, es la cordialidad con la gente. En lo que respecta al método de su Wali, líder, imam (P) consiste en la paciencia ante la adversidad y la desgracia”.

Cabe señalar que tanto el Profeta (P) como los imames (P) basan su filosofía en el marco del realismo. Es decir que su didáctica toma en consideración la necesidad del interlocutor, esto es, ellos no organizan seminarios y conferencias para tratar un tema. Orientan lo suficiente a cada persona o grupo de individuos en un momento dado y un lugar determinado. Esa es la tarea del maestro que educa a sus discípulos, les purifica poco a poco, de forma gradual. A eso se refiere el versículo coránico: “Fue quien envía a los iletrados un mensajero de entre ellos, les recita sus versículos, les purifica y les enseña la Escritura”Al yumu’a/2. De ahí que podemos encontrar muchos Hadices que abordan un tema de interés para el creyente y cada Hadiz toca una parte distinta a los demás ángulos enfocados por otros Hadices. De esta forma el discípulo recibe pequeñas dosis de forma continua y amena.

Volviendo a nuestro Hadiz, el imam Rida (P) afirma que un individuo no puede pretender ser creyente si no reúne aquellos tres requisitos:

1) El método de su Señor (ocultar los secretos). En la súplica de la despedida del mes de Ramadán, el Imam Sayyad enfoca como idea principal de su invocación el perdón de Dios y su favor sobre sus siervos. A este respecto, el Profeta (P) dice: “quien muestra su arrepentimiento Dios le oculta sus pecados. Alguien le preguntó: ¿Cómo los oculta? El profeta (PBd) responde: Dios hace que los dos ángeles que registran sus acciones se olviden de lo que escribieron, asimismo inspira a sus sentidos y a toda la Tierra para que no revelasen sus pecados, de modo que cuando comparezca ante su Señor, no habrá nada que dé testimonio contra él: “El día que sus propias lenguas, manos y pies testifiquen contra ellos por lo que hacían.”Annur/24

“Hasta que al llegar a él (al fuego), sus oídos, sus vistas y sus pieles den testimonio contra ellos por lo que hacían. Y (ellos) dirán a sus pieles: ¿Por qué testificáis contra nosotros? Fusilat 21.

Deducimos de esta cualidad y método de Dios que el creyente tiene que esforzarse en este aspecto para guardar secretos de sus hermanos y procurar no revelar los defectos y transgresiones de los demás:

Evidentemente guardar secretos o saciar de olvido los deslices y errores ajenos requiere un pulido del corazón que a su vez influye en la lengua.

2) El método del Profeta (P): la cordialidad. El primer método está más bien relacionado con la interioridad del creyente, mientras que el segundo se abre al campo exterior, a la forma de comportarse con el prójimo: “En verdad por una misericordia de Dios, fuiste blando con ellos. Pues si hubieras sido seco y duro de corazón, rápidamente se hubieran apartado de ti”. 3/119

Con este método podemos invadir corazones e influir positivamente incluso en los enemigos. ”No son iguales las buenas acciones que las malas. Rechaza el mal con lo que es mejor y aquel con el que estabas enemistado se comportará como si fuera un amigo íntimo. Y eso solo lo consigue quien tiene paciencia. Eso solo lo consigue quien posee una inmensa porción” (se refiere de perfección humana y buenas cualidades) 41/35

3) Finalmente la cualidad de la paciencia es considerada la piedra angular de todas las demás cualidades. Es la que allana el camino y hace que el creyente consiga buenos modales que le son requeridos, antes que nada, por su condición humana. Luego habría que afianzarlos por las instrucciones del islam y enfocarlos desde la dimensión del sometimiento a Dios. La paciencia es una cualidad que estipula una serie de esfuerzos continuos hasta convertirse en un valor que se ejerce de forma espontánea. Por consiguiente al creyente le resultarán fáciles y de forma fluida tanto las obligaciones religiosas, estrictamente hablando, como el buen comportamiento en su vida cotidiana.

Evidentemente la paciencia, como matriz de todos los caracteres, es el corta fuegos que protege la fe de toda alteración bien ante seducciones o ante coerciones. El Hadiz del imam Rida(P) designa la paciencia como cualidad del imam porque quizás los imames son los que más han sufrido en su carrera de divulgar y proteger el legado del profeta (PBd).

Como conclusión estas tres cualidades: guardar secretos, comportarse bien con el prójimo y armarse de paciencia son, sin duda, una buena señal de un grado de perfección que supone previos esfuerzos y ejercicios considerables en el ámbito de la disciplina del alma.

Brahim Amal

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