La prédica de Ramadán del Profeta Muhammad (PB)

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La siguiente narración fue recogida por Al Saduq en la pág. 84-85 de su Al Amali: “Muhammad ibn Ibrahim dijo que Ahmed ibn Muhammad al Hamadani dijo que Ali ibn al Hassan ibn Fadal dijo que su padre citó al Imam Ali bin Musa al Rida, padre de Al Hassan (P), quien a su vez citó a su padre Imam Musa bin Yafar (P), que citó a su ancestro el Señor de los Mártires, el Imam Husain ibn Ali ibn Abu Talib (P), que dijo que el Mensajero de Al-lah (PB) pronunció un sermón en una ocasión en el que dijo:

“¡Oh gente! Os ha llegado un mes cargado de bendiciones, misericordia y perdón. Es un mes que Al-lah considera el mejor de todos los meses. Sus días, a los ojos de Al-lah, son los mejores días; sus noches son las mejores noches; sus horas son las mejores horas. Es un mes en el que estáis convocados a ser los invitados de Al-lah, y durante este tiempo estáis considerados dignos de disfrutar de la Gracia de Al-lah.

Vuestra respiración alaba al Todopoderoso y vuestro sueño también. Vuestros actos voluntarios de adoración son aceptados y vuestras súplicas son respondidas. Pedid a Al-lah, vuestro Señor, por lo tanto, con sincera intención y un corazón puro y ayunad durante el mismo y recitad Su Libro, porque desgraciado es quien se vea privado del perdón de Al lah durante este gran mes. Y dejad que vuestro hambre y sed durante este mes os recuerden el hambre y la sed del Día de la Resurrección. Dad limosna a los pobres y necesitados de entre vosotros; mostrad respeto a los ancianos y sed amables con vuestros hijos. Visitad a vuestros parientes y proteged vuestra lengua; y no miréis lo que Al-lah os ha prohibido ver y no escuchéis cualquier cosa que vuestros oídos tengan prohibido oír. Sed amables con los huérfanos de los demás para que los vuestros reciban igualmente amabilidad. Arrepentíos de vuestros pecados ante Al-lah y levantad vuestras manos hacia Él en señal de súplica durante los tiempos de vuestras oraciones, porque son los mejores momentos durante los cuales el Todopoderoso mira con misericordia a sus siervos y responde a sus súplicas cuando le piden.

¡Oh gente! Vuestras almas se ven afectadas por vuestras obras. Por lo tanto, liberadlas buscando el perdón de Al-lah. Vuestras espaldas están sobrecargadas por el peso de vuestros pecados. Por lo tanto, aligerad su carga prolongando vuestra postración. Sabed que el Exaltado y Todopoderoso ha jurado por Su dignidad no castigar a aquellos que realicen sus oraciones y se postren ante Él, y no aterrorizarlos con la vista del Fuego cuando las personas resuciten en el Día del Juicio.

¡Oh gente! Quien entre vosotros proporcione un iftar a un creyente durante este mes recibirá una recompensa igual a la persona que libera a un esclavo, y sus pecados serán perdonados.

Dicho esto, la gente le dijo: “¡Oh Mensajero de Al-lah! ¡No todos podemos hacer eso! Él (PB) respondió diciendo:

¡Evitad el fuego del infierno incluso con medio dátil! ¡Evitad el fuego del infierno incluso con un trago de agua! ¡Oh gente! Quien entre vosotros mejore su conducta durante este mes tendrá un paso seguro en Al Sirat Al Mustaqim, (el Camino Recto) cuando muchos pies resbalen, y quienquiera de entre vosotros que disminuya las cargas de su esclavo (o cualquiera que trabaje para él) será recompensado por Al-lah disminuyendo su dación de cuentas.

Quien de entre vosotros se abstenga de dañar a otros se salvará de la Ira del Todopoderoso cuando lo encuentre.

Quien de entre vosotros brinde generosidad a un huérfano será recompensado por Al-lah siendo generoso con él en el Día del Juicio.

Quien de entre vosotros mejore los lazos con sus parientes será recompensado por Al-lah, que lo incluirá en Su misericordia, y a quien de entre vosotros rompa sus lazos con sus parientes, Al-lah retendrá su misericordia hacia él cuando se encuentre con él.

A quien de entre vosotros ofrezca oraciones voluntarias, Al-lah le salvará del tormento del Fuego.

Quien de entre vosotros realice una obligación recibirá la recompensa de quien haya realizada setenta obligaciones en otros meses.

Quien de entre vosotros aumente su envío de bendiciones para mí, Al-lah hará que el peso de sus buenas obras sea mayor cuando su peso en las escalas sean ligero.

Quien entre vosotros recite un verso del Sagrado Corán recibirá la bendición de quien recite todo el Sagrado Corán en otro mes.

¡Oh gente! Las puertas del Paraíso en este mes se mantienen abiertas, así que rezad a Al-lah, vuestro Señor, para que no las cierre para vosotros. Y las puertas del Fuego permanecen cerradas; así que rezad a Al-lah para que vuestro Señor no las abra. Y los demonios permanecen encadenados; así que rezad a Al-lah para que vuestro Señor no los desate contra vosotros.

Con el fin de enseñar al gran sahabi (Compañero) Abu Tharr al Ghifari, que Al-lah esté complacido con él, que el ayuno es una protección contra el Fuego, el Profeta (PB) dijo: “¿Quieres que te informe de una acción que, si la realizas, mantendrás a Satanás alejado de ti tanto como la distancia entre el este y el oeste de la tierra? Al Ghifari respondió: “Sí, en verdad, ¡Oh Mensajero de Al-lah!”. Él (PB) dijo: “El ayuno oscurece su rostro (el de Satanás); la limosna le rompe la espalda; el deseo de agradar a Al-lah y la entrega de ayuda para hacer buenas obras le corta la cola y el buscar el perdón de Al-lah le corta la aorta”. Luego él (PB) añadió: “Para todo hay purificación (zakat) y la purificación de los cuerpos es el ayuno.”

Él (PB) también es citado diciendo: “Alguien que ayuna se considera que adora a su Creador incluso mientras duerme en su cama siempre que no hable mal de ningún musulmán”. Él (PB) también dijo: “Hay dos ocasiones felices para cualquiera que realice el ayuno: una es cuando rompe su ayuno y la otra cuando se encuentre con su Señor, el Exaltado, el Todopoderoso. Juro por Aquel que controla la vida de Muhammad que el olor en la boca de quien ayuna es mejor a la consideración de Al-lah que el dulce olor del almizcle.”

Él (PB) también ha dicho que el Exaltado y el Todopoderoso dijo (en un hadiz qudsi) que “todas las buenas obras de un descendiente de Adán son suyas excepto el ayuno, porque es Mío y lo recompensaré por él. Todas las buenas obras del hijo de Adán son recompensadas de diez a setecientas veces, excepto la perseverancia, porque es mía y yo se la recompensaré a Mi modo”. Así pues, el conocimiento de la recompensa por la perseverancia pertenece a Al-lah, y la “perseverancia” significa el ayuno.

Con respecto a la interpretación del verso (del Sagrado Corán) “Y busca ayuda con la perseverancia”, es decir, el ayuno, se informa que la persona que ayuna disfrutará de los Jardines del Paraíso y los ángeles siguen orando por él hasta que rompe el ayuno. Si un creyente pasa una parte de la noche para realizar oraciones opcionales adicionales y luego se despierta ayunando no se registrará ningún pecado contra él.

Cada vez que dé un paso, se registrará como una buena acción para él, y si muere durante el día, su alma ascenderá a las alturas del Paraíso. Si vive para romper su ayuno, el Todopoderoso lo considerará entre los que a menudo regresan a Él para buscar el perdón. En el libro titulado Zawab al Amal, el autor, a saber Shaij al Qummi al Saduq, cita un hadiz que señala que el Mensajero de Al-lah (PB) dijo: “El sueño de alguien que ayuna es como adoración, y su respiración alaba al Todopoderoso”.