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Miray. El Viaje Nocturno del Profeta Muhammad (PB) (1)

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Miray. El Viaje Nocturno del Profeta Muhammad (PB) (1)

El Profeta del Islam (PB) comenzó su histórico viaje nocturno, junto con el Ángel Yibril (Gabriel) desde la casa de Umm al Hani, la esposa de su tío y hermana de Amir al Muminin Ali (P), en la ciudad de Meca. Con la ayuda de su corcel, Al Buraq, el Profeta (P) viajó a Baitul al Muqaddas (Jerusalén), un lugar que también es conocido como Masyid Al Aqsa (la Mezquita Más Lejana). Él llegó a este lugar en un período muy corto de tiempo, visitó varios áreas del sitio y en algunas de ellas hizo una oración de dos rak´ats.

En la siguiente etapa de su viaje, él ascendió desde este lugar a los cielos, donde fue testigo de los cuerpos celestes y de todo el universo. Él habló con los espíritus de los anteriores profetas y con los ángeles. Contempló desde muy cerca el Paraíso y el Infierno, recibió los secretos de la creación y de los orígenes del Universo y presenció la expansión del mundo de la creación y el Poder Ilimitado de Al-lah el Altísimo.

De forma subsiguiente, él continuó con su viaje hasta que alcanzó la región denominada Sidratul Muntaha, un lugar que estaba dominado por la grandeza y la magnificencia. Desde allí, él volvió, visitó una vez más Baitul Muqaddas y regresó a Meca y luego a su casa.

Durante el viaje de vuelta, él vio una caravana de la tribu de Quraish que durante su viaje había perdido uno de sus camellos, que ellos estaban buscando. Y al amanecer llegó a la casa de Umm al Hani.

Tras su retorno, el Profeta (PB) habló a Umm al Hani de los secretos (que él vio) y esa tarde, en una reunión de la gente del Quraish, les habló de su viaje y abrió sus mentes a este hecho. La narración del Miray se difundió de boca a boca entre todos los grupos y, más que nunca, el Quraish estaba irritado con él.

El Quraish, como era su costumbre en aquella época, rechazó las palabras del Profeta (PB) y durante el encuentro un hombre se levantó y preguntó si había alguien en Meca que hubiera visto Bait al Muqaddas parra que pudiera preguntar al Profeta (P) detalles sobre los edificios. No solo el Profeta (PB) describió las particularidades físicas de Bait al Muqaddas sino que él les informó del hecho que tuvo lugar en el viaje desde Bait al Muqaddas y Meca y no pasó mucho tiempo hasta que los viajeros (de aquella caravana) relataran los hechos exactos que habían ocurrido y que coincidían con el relato del Profeta (PB).