«Arba’in: Segundo episodio de ‘Ashura»

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“En verdad la matanza de Husain (P) genera, en los corazones de los creyentes, una energía que jamás se enfría”.  Mustadrakul-uasáel, 10 318.

No es una mera constatación ni se trata de un análisis de los hechos sino de una aseveración del profeta (PBd), una aseveración que no está basada en la dimensión emocional. Es una sentencia profética que debe tener sus efectos en la realidad porque el profeta no habla por propio impulso:” Y no habla por su propio deseo sino que es una inspiración que se le fue revelada” La Estrella 2. Es una realidad divina irrefutable que nos ha transmitido el profeta (PBd) del mismo modo que nos ha puesto al tanto de unas verdades futuras algunas de ellas ya se han hecho realidad y otras están aún por ser realizadas.

Antes de empezar a descifrar el contenido de ese Hadiz habría que anticipar una introducción. En primer lugar no cabe lugar a dudas de que Ahlul bait (P) son las mejores personas después del Profeta (P) por su sabiduría, espiritualidad, devoción, proximidad a Dios, su abnegación, su desapego por lo material, etc. En segundo lugar como consecuencia de lo anteriormente mencionado representan la segunda fuente de la legislación en el islam. No obstante no podemos afirmar que todos los miembros de Ahlul Bait tienen la misma posición dentro del espectro del imamato. Existen, por consiguiente, puntos distintos, como la preponderancia y la superioridad referida a la posición asignada a un imam en comparación con otro imam. En efecto se trata de una designación divina inmutable, es decir, que el imam ‘Ali(P) es el mejor de todos los imames. Otro punto sería una característica o peculiaridad que hace lucir la persona de un imam comparándolo con el resto de los imames.

En rigor dicha preferencia parte de una visión puramente coránica: “Estos son los Mensajeros, a algunos de ellos les hemos favorecido sobre los otros” 253/ Al Baqara.

A tenor del contenido de ese versículo el criterio de preferencia es evidente y aplicable a los profetas y por consiguiente si nos atenemos a la aleya de Al Mubáhala deducimos, de forma segura, que el imamato no escapa a esta regla.

Ahora bien la peculiaridad o las peculiaridades son las que distinguen a unos de otros a pesar del rango de cada cual. En el caso de los profetas se distingue Moisés por su báculo, Jesús por la curación de ciertas enfermedades, Sáleh por la camella que salió de una roca, Ibrahim por salir sano y salvo tras de un intento de convertirle en cenizas.

En el caso de los imames asimismo notamos diferencias: Imam ‘Ali por su elocuencia y valentía; Hasan por su paciencia; Husain por su audacia, determinación y firmeza; Asayyad por optar por las súplicas y letanías; Al Baquir por mostrar las ciencias; Asadiq por fundar la escuela de Ahlul Bait (P), etc.

Volviendo al Hadiz arriba mencionado, el profeta (PBd) dice que la matanza de Husain(P) tiene sus repercusiones en los creyentes. Es un rescoldo que se mantiene vivo de forma intemporal en los corazones que asimilan el sentido del sacrificio y de la entrega a una causa tan noble como la del imam Husain(P). Es un estado incandescente pero no solo en el sentido patético, sino también como modo de vida que se materializa en todas las dimensiones del creyente, esto es, a nivel espiritual, cultural, social, político, etc. Evidentemente esos ecos de la matanza de Husain(P) no retumban con la misma intensidad y fuerza en todos los corazones de los creyentes. En función de la capacidad de cada uno en los campos aludidos anteriormente, como es normal, varía el resultado de los efectos del martirio del Imam Husain(P). No obstante es menester mantener un nivel mínimo para no rebajar el valor del evento de Karbala.

El Profeta (PBd) dice que la masacre de Husain(P)  es el motor que mueve al creyente, es la brújula que le indica la dirección que tiene que seguir en medio de la confusión, el caos y la degeneración en la que está envuelta la inmensa mayoría en todos los pueblos. Se trata de una energía positiva, candente, renovable que posiciona al creyente en una lucha continua e incesante. El corazón que recibe la irradiación del evento de Karbala ha de estar siempre en sintonía con las aspiraciones del imam Husain(P): Liberar a la humanidad de la opresión de los tiranos, difundir los valores humanos que elevan a la sociedad y contribuyen a su prosperidad. Es una energía que nunca se apaga cuando el corazón está vivo, cuando asimila los valores de Karbala porque, entonces, se concibe que todo lugar es Karbala y cada día es ‘Ashura, mientras la injusticia no para de apesadumbrar a las masas, mientras la corrupción va ganando terreno, mientras la esclavitud del hombre reaparece disfrazada de unos rostros atractivos, mientras se maltrata a las familias por los valores que operan en los medios de comunicación, sobre todo la televisión. En estos campos estaría Husain(P) si estuviera entre nosotros y en estos terrenos debemos actuar dentro de las posibilidades de cada uno si queremos mantener llameante el espíritu de la epopeya de Karbala no solo en la conmemoración de ‘Ashura o del Arba’in sino en nuestra conducta. Arba’in es la segunda fase del escenario de Karbala. La conmemoración del Arba’in es una corroboración de que el sacrificio del Imam Husain(P) no fue un evento efímero sino que es un suceso muy arraigado en los corazones de sus seguidores que van en aumento cada año. En definitiva, Arba’in viene a afirmar que la sangre vertida en la tierra de Karbala no fue en vano sino que servía para reavivar el espíritu de lucha por la justicia y la equidad. Es un programa de reformas y correcciones que hemos de llevar a cabo tanto dentro de la comunidad misma de los seguidores de Ahlul Bait(P) como en demás terrenos. En realidad lo lógico es que esa energía que no se enfría sea un motivo que desate, primero, una revolución en el interior del ser seguida después de un esfuerzo por reformas en el exterior.

Brahim Amal

 

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